Residencia Universitaria Gran Vía (Vigo)

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MAL. Tendría que entrar una cuadrilla de profesionales (albañiles, fontaneros, electricistas…) a resolver todas las deficiencias del edificio (humedades, aislamientos, frío, inundaciones…); sustituir la mayor parte del mobiliario por estropeado y, posteriormente, un equipo de PROFESIONALES para gestionar el día a día de los y las usuarias, dado que el actual es inoperante, despreocupado y falso. La comida escasa y de poca calidad (no achacable al personal de cocina sino a la gerencia), sin cocinerx los fines de semana y por lo tanto todo precocinado y/o de días anteriores. Ante los problemas existentes, la solución de la dirección era ofrecer una colección amplia y variada de disculpas y promesas. Aviso a navegantes.

Reservo una habitación (700€) y me garantizan que si no la ocupo y ésta es asignada a otra persona me devuelven el dinero. Después ser ocupada la habitación por otra persona, de mucho insistir y dándome largas continuamente, me devuelven la mitad de la reserva.

He estado el año 2021-2022 residiendo en la residencia y he de decir q todo lo q dice, tiene razón pero le ha faltado nombrar q el wifi ha sido una completa basura durante todo el año, yo tuve q pagar un servicio de datos móviles ilimitados lo cual me toco bastante los cojnarices. No os dejéis influir por los comentarios buenos hacia esta residencia ya q son de personas q se han quedado 3 días en verano y no un año entero, un saludo

Estoy leyendo las reseñas con 5 estrellas y parece que no estuviéramos hablando del mismo lugar. Lo único bueno es que está céntrico. Por lo demás, voy a tomarme la molestia de escribir esta reseña para que pillen al menor número de incautos posible, como yo, cosa que hubiera agradecido saber cuando el verano del 2021 tuve que contratar este alojamiento para el curso universitario 2021-22. Intentaré ser lo más breve posible cosa que no va a ser fácil porque el número de despropósitos de este lugar roza el infinito: - Las instalaciones son viejas, MUY VIEJAS. Las ventanas no cierran, hay baños encharcados de forma perpetua y habitaciones con goteras. Siempre dicen que lo van a arreglar pero eso nunca llega. - Ponen la calefacción una hora al día. Se pasa frío en las dependencias y habitaciones teniendo en cuenta que por el covid además hay que ventilar a menudo. En plena ola de frío, decidieron que ya había llegado el momento de apagar la calefacción, porque ya no era época (marzo aprox). El sistema es tan viejo, obsoleto y ruidoso que en la mayoría de habitaciones no funcionaba y en esos casos les tenían que repartir calefactores eléctricos, los cuales tampoco se podían usar porque saltaban los diferenciales. - Dicen que lavan la ropa: MENTIRA. El programa que utilizan en la lavadora es de 15 MINUTOS o muy cortos con lo cual la ropa no queda mínimamente limpia y, si no da tiempo a que la tiendan, queda en la lavadora hasta el día siguiente, cogiendo mal olor por la humedad y porque no la secan correctamente. - La limpieza brilla por su ausencia, sencillamente porque solo tienen a una persona para que en 4 o 5 horas te limpie toda una residencia con 30 habitaciones, espacios comunes y baños. Yo avisé 6 días antes de mi llegada y mi habiación estaba literalmente sucísima. Tuve que ponerme a pasar un trapo por los 4 muebles que tenía y salió negro!! - La COMIDA ES HORROROSA. Salvo excepciones está mal cocinada, batiburrillos de ingredientes, precocinados, desequilibrada, a veces platos fuertes de mediodía para cenar, o únicamente dos primeros platos para comer, escasa, sin apenas frutas ni verduras ni pescado ni legumbres... Les inflan a pasta, arroz y patatas. Y como solo haya dos o tres comensales les apañan con un bocadillo. En muchas ocasiones los residentes marchaban al súper a comprar porque la comida o era incomible o no les llegaba. Ya se les dió un aviso por estas vergonzosas circunstancias pero hicieron caso omiso. - Y, por cierto, da igual cuando llames para reservar. Entre los residentes contrastaron que a todos les dijeron que su habitación era la última disponible, para meterte prisa, que no puedas pensar y encima firmes un contrato anual. - La publicidad es ENGAÑOSA. MUCHO OJO!! Las fotografías que publican SON ANTIGUAS. Ya no están en esas condiciones tan atractivas ni de lejos!! La veo y me indignan!! La habitación que te enseñan, en la mayor parte de los casos no es la que te van a adjudicar sino la que tienen en mejor estado. Mobiliario muy deteriorado. Mi pupitre era muy viejo y colocaron un tablón un poco menos viejo encima. - Invaden la intimidad de los residentes mostrando sus habitaciones a futuros inquilinos cuando aún las tienen ocupadas y en, numerosas ocasiones, SIN PERMISO del residente. CUTRES A MÁS NO PODER. Incluso los residentes se unieron en un ultimátum para instar a los propietarios a arreglar los desperfectos más apremiantes durante las vacaciones de Navidad o no pagarían la cuota de enero, pero LES DÍO EXACTAMENTE IGUAL. La gente, por vergüenza pagó, pero ellos no la tienen. Siento haberme alargado en esta reseña más de lo deseado pero, recordando esta horrorosa estancia de 9 meses pagando 700 hermosos € , ME ENCIENDO!!. De hecho, ésta es la punta del iceberg pero no quiero extenderme más a menos que alguien esté interesado. No obstante, aquí ya tenéis información suficiente que ya hubiera querido yo tener en aquel momento! Suerte con tu búsqueda de alojamiento. Todo empieza bien para ti si optas por otras opciones. Me gustaría poner menos estrellas, pero no puedo.